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Océano de Ilusiones

Sabor amargo

Sabor amargo

 

instantes de silencio

en cualquier lugar

la casa, el trabajo,

al andar, se acerca

la agonía, un sentir,

recuerdos que hoy cobran vida

en un momento no acertado

los cambios producen crisis

aún nadie se ha salvado

 

el sabor amargo

que mi paladar ha percibido,

me ha de prestado un rictus

que  mis ojos no han reconocido

el dolor, que arremete y se mete

en cuanta grieta corregir, no he sabido

 

la alegría me abandona

la amargura se instala, dueña

y señora de este ser

que hoy pide a gritos tener

un buen par

de alas

12 comentarios

SoL -

luz...amiga...luz :)

Letizio Pantoja -

Hay sabores muchos más amargos contra los que debemos luchar. te invito a unirte a nuestra red blogger contra la pederastia para algún día saborear con alegría lo más dulce

Angel -

Te daría un buen par de alas...si pudiera,

pero seguro que ya tienes las tuyas propias, que sólo han de volver a recordar lo bueno que era volar.

Vuela alto y sin miedo.
Ánimo.

Un abrazo enorme.

Lulú -

me encantan los temas de este blog... derrepente paso y lo deeeeejo hasta que termina la ronda y vuelve a empezar.
Neptunia, me imaginé que eras pisciana como yo.

Fernando -

no hay donde volar si no sabemos andar...seguro..besos.

More -

qué triste!! no la dejes mucho tiempo, que no marchite, que no rompa sin remedios tus alas.
Abrazos

Bett -

Coincido con Pato, este poema te dio las alas... solo tienes que sonreirle a los momentos y no dejarte caer
Abrazos Neptunia!

Pato -

Este poema han sido tus alas, escribirse es como abrir los brazos y volar.

Es verdad los cambios provocan crisis, pero eso es señal de que hay vida allí, a las estatuas no les pasa eso ;)

Besos y alitas.

torosalvaje -

Te leo y tu poema me parece un espejo.

Un fuerte abrazo.

Verónica Tapia -

Me gusta mucho la sencillez de tus letras, espero estes bien, besos

oceanida -

Si lo desas de verdad, cierra los ojos y vuela, sabes que puedes.

Eres sirena, recuerdas?

Un abrazo desde el mar.

Isabel -

Cuánta tristeza y sensibilidad en tus palabras, y créeme que entiendo lo que es desear tener alas, volar más allá del mar, al encuentro de la alegría y la felicidad. Pero lo importante es lo que encontramos a nuestro lado, las pequeñas cosas. Es un poema precioso. Besos.